El CARDO MARIANO o Silybum marianum como se conoce científicamente, es una especie del género Silybum y a su vez, perteneciente a la familia de las Asteraceae.

Respecto a su nombre hay una leyenda medieval que hace referencia a la Virgen María, la cual y según la historia, escondió a Jesús con las grandes hojas de esta planta de los soldados de Herodes.

Las semillas del CARDO MARIANO, se han venido usando desde hace siglos con fines medicinales.

PROPIEDADES DEL CARDO MARIANO

Las propiedades conocidas de estas semillas se deben a su contenido de tres activos tales como:

La silibina, la silcristina y silidianina, que juntas forman un complejo protector hepático llamado silimarina.

Además de promover una buena salud del hígado, también son relevantes otros usos de las semillas.

Tienen propiedades estimulantes de la circulación sanguínea, con lo que se consigue tanto una mejoría en casos de piernas cansadas o adormecidas, como la desinflamación de hemorroides y también de varices.

Además de esto también son un buen remedio natural para regular los niveles de azúcar en la sangre.

Por otro lado, aligeran las digestiones pesadas y también alivian en casos de empacho.

Las semillas de CARDO MARIANO, mejoran los síntomas de las alergias estacionales.

A su vez, ayuda a desintoxicar el hígado en casos de consumo de alcohol, y al mismo tiempo ayuda en la eliminación tanto de pesticidas como de metales pesados.

También poseen  antioxidantes, por lo cual, nos ayuda a retrasar el envejecimiento de las células y también a mejorar la salud de la piel.

Debemos tener en cuenta que como todo en esta vida hay que tener mesura.

Un exceso de CARDO MARIANO, puede ocasionar tanto diarreas como dermatitis en casos de pieles sensibles.

Esta planta no está recomendada para personas que padecen de hipertensión.

Al mismo tiempo, tampoco se debe tomar junto a medicamentos para la depresión.

No consumir durante el embarazo o en época de lactancia.

USOS 

En infusión, hay que  calentar agua en un cazo y además añadir una cucharada de postre por cada vaso.

Seguidamente, dejar hervir un par de minutos y apagar el fuego, por último, dejar reposar unos 10 minutos y consumir.

Para uso tópico, deberemos preparar la infusión de la misma forma y dejar enfriar.

A continuación, mojaremos  un algodón y lo colocaremos sobre una herida, quemadura o llaga a tratar.

IMPORTANTE

Puede contener trazas de apio, mostaza, sésamo y frutos cáscara.

La información que pueda encontrar en Mil y una especias, es de carácter meramente informativo.

En ningún caso se debe reemplazar su medicación o tratamiento si los tuviera, por los productos que aquí encuentre sin consultar previamente a su médico.